La salud bucodental de los más pequeños debe empezar a cuidarse desde que nacen. Empezaremos limpiando las encías, lengua e interior de las mejillas del bebé previo a que hayan erupcionado los dientes temporales con una gasa o paño humedecido con agua.

En el momento de la aparición del primer diente podremos pasar a utilizar un cepillo suave adecuado para lactantes o dedal de silicona con dentífrico 1000ppm. La cantidad debe ser semejante al tamaño de una lenteja.

Cuando erupcionan los molares es aconsejable empezar a utilizar el hilo con cera para evitar que quede comida entre ellos.

¿Qué pasa si el bebé traga el dentífrico con flúor?

No pasa nada. Por ello, es importante seguir las indicaciones de la cantidad de pasta que debemos utilizar para cada rango de edad. Así el riesgo de fluorosis es prácticamente inexistente.

SECUENCIA DE ERUPCIÓN

La primera dentición de los niños o dientes de leche comienzan a erupcionar a los 6 meses.

Hay que tener en cuenta que cada niño tiene su ritmo de crecimiento y, por lo tanto, los dientes podrán salir en unos antes y en otros más tarde.

Hasta los 15-16 meses podría considerarse normal. A partir de la erupción del primer diente, irán saliendo el resto.

La secuencia de erupción:

  • Incisivos centrales inferiores: 6 meses
  • Incisivos centrales superiores: 8 meses
  • Incisivos laterales superiores: 10meses
  • Incisivos laterales inferiores: 12 meses
  • Primeros molares superiores/inferiores: 16 meses
  • Caninos superiores inferiores: 20 meses
  • Segundos molares superiores/inferiores: 24-30 meses

Tampoco nos deberemos preocupar si a nuestro hijo le ha salido un diente antes que el otro. Se puede dar el caso que el proceso de erupción sea diferente tanto en tiempos como en orden de aparición.

Deberemos tener en cuenta que, si los dientes salen tarde, también se caerán más tarde y los definitivos tardarán más en erupcionar.

POSIBLES MOLESTIAS Y CONSECUENCIAS DE LA ERUPCIÓN DENTARIA

¿Fiebre?

Puede ocurrir que con la aparición de los primeros dientes coincidan este tipo de síntomas, pero deberemos tener en cuenta que, a los 6 meses, suele ser frecuente que los niños cojan infecciones y que eso provoque temperaturas superiores a los 38ºC.

Si el niño tiene fiebre persistente superior a los 38ºC, deberemos buscar el origen de esa temperatura y no escudarnos en la erupción de los dientes.

¿Cómo aliviar los síntomas?

¡Cuidado! Con los objetos que se les da para aliviar estos síntomas. Pueden ser peligrosos puesto que pueden provocar asfixia y atragantamiento cuando el bebé se lo mete a la boca.

Para aliviar las posibles molestias de la inflamación y enrojecimiento de las encías del bebé podremos colocar sobre la encía del bebé un objeto frío (específico para este fin) y masajear las encías con un cepillo.

Hay veces que antes de salir el diente, aparecen hematomas en la encía, no nos deberemos preocupar por ello, el diente acabará erupcionando.

Cualquier duda acuda a su odontopediatra, no lo medique sin pautas específicas.

En el caso de que la situación se prolongue, tenga fiebres altas, problemas digestivos que cursen con vómitos y diarreas prolongadas deberemos remitirlo al pediatra para buscar la causa.